viernes, 10 de febrero de 2012

REMOJADNOS EN EL LODO

 


Ducktorrado ha parpado y me ha dicho:
 
"Dicen que las palabras se las lleva el viento y los escritos perduran, pero las mentiras escritas pueden colar por verdades perdurables. Las empresas que se conocen como compañías de servicios * contratan catervas de relaciones públicas, chimpancés del marketing y publicistas tarugos para engañar al populacho a lo grande, con el beneplácito de los títeres al mando. La constancia de un engaño se encuentra directamente relacionada con creérsela sin discrepar.

No son más mentirosos que aquel vendedor de alarmas con pantalones de corte industrial y chaqueta demasiado corta que, con su tarjeta de 'técnico consultor de empresa certificada de seguridad y vigilancia', asegura que los ingenios que pretende colocar son de de última generación tecnológica porque son de fabricación israelí. Si en el aparato dice 'Made in Taipei’ es porque los del Mossad son muy prudentes y discretos.

La gracia de las manipulaciones es que no se notan, y tienen el talento de parecer no querer persuadirnos de nada."

Espero y deseo que Ducktorrado nunca se tenga que dar de baja por teléfono.

* Nota del autor: compañía no siempre deseada y casi nunca de buen servicio.

Canción recomendada: Vamos muy bien, Obús, 1984.

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